lunes, 16 de febrero de 2009

Salida 15/02/09

Despertaba el Domingo y los jelopinos, comenzaban una nueva aventura, pero esta vez con dos nuevos componentes en el equipo, Joaquín que por fin ha decidido dejar a un lado sus obligaciones e Iñigo que vino por primera vez con nosotros y que tuvimos que atarlo con cuerdas para que no se nos escapase.

Y como si de verano azul se tratase comenzamos nuestra andadura por los caminos que nos llevarían hasta Murillo, para más tarde llegar hasta Galilea.



Pero si todo saliese según lo previsto, no seriamos los jelopinos, el primer obstáculo, que era de esperar, el río grande que antes era chico, por el que nunca bajaba agua, ahora no cabe en su cauce y atravesarlo es imposible,



lo que nos hace cambiar el rumbo y retroceder sobre nuestras rodadas para tomar el puente y cruzar por donde lo hace todo el mundo, (para eso trabajaron en su momento los romanos).

Ya estábamos en camino cuando las pilas del GPS de LuisMa tocaron a su fin y nos llevaron al camino que no va a ninguna parte, y que es mundialmente conocido, aquí dejo constancia.



Ahí estuvimos antes de cambiar la ruta por segunda vez, y subir la cuesta que lleva hasta el infinito y mas allá o al menos eso parece cuando la estas subiendo y que ninguno pudimos subir sin hacer una paradita, pero no pasa nada, es así como realmente se disfruta y la única manera de conocer cosas nuevas, saliéndose de lo típico.



Y pedalea que pedalea, sube cuesta y baja cuesta, el destino nos fue llevando hasta encontrarnos con la gran columna, pero no una columna cualquiera sino la gran columna de humo que habrá que saber lo que lleva, pero que ahora lo llaman "Vapor de Agua" y es desprendido por las inmensas chimeneas de la central térmica, que dicho sea de paso, guardan un parecido con las de la central donde Homer Simpson pasa sus ratitos.



El siguiente paro obligatorio, era nuestro encuentro con el clero, porque siempre que paramos a almorzar, no se porque extraña razón lo hacemos al amparo de la iglesia, en este caso la de Arrubal, y así con los alimentos bendecidos y eso sí el sabrosísimo chorizo de Jabalí que Joaquín se olvido en casa, templamos el cuerpo que ya pedía lo suyo desde hacia rato.



En el camino de vuelta, y justo después de que Rober me arreglase un poco el cambio, (osea antes del arreglo me fallaba el piñón pequeño, después del arreglo me seguía fallando el pequeño y además el cambio entre el cuarto y el quinto), el destino





quiso que una serie de arboles caídos nos cortaran el paso teniendo que atravesar el bosque, y como no, contribuir al medio ambiente aportando nuestro pequeño granito de arena, aunque en este caso venga en forma de riego de ciertas variedades de plantas a las que esta es la única forma de que les llegue el agua, dada su ubicación siempre esquiva y oculta, y manos a la obra como si de el cuerpo de bomberos se tratase cada uno con su manguerita.





Además de ser nuestro director de etapas LuisMa es campeón del mundo de trial-sin, como podéis apreciar en estas fotos, y nos deleito con unos saltitos en el tronco que seguro serán la envidia de muchos trialeros.



Sin palabras y anonadados, dimos buena cuenta de la cuesta que lleva hasta el eco-parque para presentarnos en un periquete en casa y dar por finalizada la etapa.

Sin mas se despide el cronista, hasta la semana que viene.

2 comentarios:

nino dijo...

se aleja laalmeja,es divorcio en arabe.dicho esto,me ha dicho un pajarito que la cuestecita alguien si la subio sin paraditas..hooo noooooooo....un saludo jelopinos

jelopa dijo...

Jelopinos ahora si que vais a flipar con el mapita que os he metido con desnivel etc, mirad la entrada anterior y ya me direis si os gusta. Intentare poner el grafico en cada etapa para hacernos una idea de por donde vamos.

A pedalear, aupa Nino animate!!!